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Casa de Campo en Abantos · España

· Residencial

Piedra y Madera, un hogar en El Escorial

Esta vivienda unifamiliar se encuentra en un lugar único que condiciona toda la propuesta de diseño y arquitectura.

Frente al Monasterio de San Lorenzo del Escorial, el terreno montañoso de la sierra, poblado de altos pinos, robles, encinas y jaras, nos retó con su gran pendiente, mientras que la impresionante presencia del Monasterio y su estricta geometría se infiltró en nuestra estructura residencial. El diseño de la vivienda incorpora de manera armoniosa los elementos naturales de la montaña y la belleza de los pinos circundantes.

CONEXIÓN E INTEGRACIÓN

La planta del proyecto, cuya orientación es exactamente la del Monasterio, se desarrolla sobre una retícula de nueve cuadros donde el cuadrado central forma un patio interior sobre el que gira la circulación interior de la vivienda unifamiliar.

A pesar de las complicaciones derivadas de la inclinación de la parcela en la montaña, la conexión con el monte nos parecía imprescindible en el diseño y la estructura residencial. La planta baja está escalonada en sección, siguiendo las cotas del terreno y permitiendo a cada espacio interior una relación inmediata con el jardín. Hacia la fachada este, la discontinuidad con el terreno en sección se resuelve elevando parte de la planta mediante un gran voladizo de madera que alberga el espacio principal de estar. Esta aparente contradicción entre la existencia de un voladizo y el deseo de estar firmemente asentada en el terreno se entiende por su orientación hacia el Monasterio. La levedad que le proporciona el voladizo enfatiza su aspiración por alcanzar la vista panorámica de la sierra.

INTERIOR

En cuanto a la propuesta de interiorismo de esta vivienda unifamiliar en la montaña, la posibilidad de construir una casa con toda la estructura interior de madera vista nos sedujo. Los cuatro pilares del patio, hechos con madera de pino de Valsaín, anclan toda la estructura interior con las vigas principales de pino laminadas (de hasta 14 metros) y las viguetas de pino macizo. Esta estructura vertebrada de madera recorre libremente el espacio diáfano que proporciona la transparencia del patio interior, formando tanto espacios de doble altura como espacios abuhardillados e íntimos. Exponiendo los nudos entre las vigas nos encontramos detalles inesperados; la madera siempre permite soluciones ingeniosas aportando indiscutiblemente carácter, calidez y confort al diseño interior de la casa.

Se produce un espacio compacto en el exterior, y a la vez espacioso y diáfano en el interior. Espacioso porque, al no tener la vivienda un piso bajo cubierta, todos los espacios son abuhardillados y los cuartos principales tienen gran altura de techo; y diáfano porque las vistas y los espacios públicos continúan a través de la transparencia del patio, brindando así una experiencia residencial única en plena sierra.

Ambas escaleras interiores de esta vivienda unifamiliar están ensambladas usando únicamente madera. Como si de un juguete de Meccano se tratase, peldaños y montantes se traban cuidadosamente produciendo una estructura suspendida de la viga de cubierta en el cuarto de juegos. Debajo, un mueble estantería completa el diseño. Los huecos de las ventanas y puertas de madera de iroco, atrapados dentro de esta retícula estructural y pétrea de las fachadas, adquieren mayor libertad de movimiento, transmitiendo al exterior la fluidez informal de la vida interior y el diseño residencial.

Desde la entrada uno se encuentra frente al patio interior en medio de la montaña, a través del cual se comprende toda la casa. Bajando metro y medio encontramos la cocina, despensa, lavandería y garaje; mientras que las zonas de uso común, tales como el comedor, cuarto de estar, porche y cuarto de jugar, ocupan las cotas bajas. Los dormitorios se encuentran en la planta superior. Un gran porche debajo del volumen de la casa que sobresale en voladizo, junto con numerosas terrazas, completan el programa de esta residencia en la sierra.

INFORMACIÓN CLAVE

CLIENTE
Privado

LOCALIZACIÓN
San Lorenzo del Escorial, Madrid

SUPERFICIE CONSTRUIDA
412 m²

SUPERFICIE DE PARCELA
2.915 m²

ARQUITECTOS
Belén Moneo, Jeff Brock

EQUIPO DE ARQUITECTURA
Íñigo Cobeta, David Gosh, Silvia Fernández, Andrés Barrón, Spencer Leaf, Brenda Moczygemba, Carlos Revuelta, Jose Galarza

ARQUITECTO TÉCNICO
Apartec, Francisco González

MODELO 3D
Andrés Barrón

INGENIERÍA DE ESTRUCTURAS
NB35

PLANOS Y DIBUJOS